Brújula práctica y honesta. Estas son las maneras en que nos comprometemos a actuar — no como promesas inmutables, sino como guías para crecer junto a la comunidad.
Creemos en recibir y adaptar: no decimos que lo tenemos todo resuelto, pero sí que escuchamos, corregimos y aprendemos. Nuestra inclusión es práctica y mejorable.
No hacemos lo nuevo por moda. Adoptamos cambios cuando aportan eficacia y sostenibilidad a quien usa nuestros productos o servicios.
No vendemos soluciones mágicas: ofrecemos lo que está a nuestro alcance y buscamos mejorar cuando algo falla.
Preferimos preguntar y abrir espacio en lugar de imponer suposiciones. Tu relato es la base para mejorar.
Honramos los tiempos y pausas de las personas y también del equipo. Trabajar sosteniblemente es parte de nuestro cuidado.
La estética acompaña, pero la función manda. Si algo es bonito y no sirve, lo rediseñamos; si algo simple funciona, lo mantenemos.
Hablamos claro sobre lo que hacemos y lo que no. Si algo no está listo, lo decimos; si fallamos, lo contamos y arreglamos.
No queremos ser otra demanda en tu vida. Si un producto o proceso nuestro aumenta tu fricción, lo modificamos.
Integramos la voz de la comunidad ND sin romanticismos ni uso mercantil. Cuando co-creamos, lo reconocemos y remuneramos si corresponde.
No buscamos ser perfectas; buscamos coherencia. Nuestros actos reflejan lo que verdaderamente creemos y estamos dispuestas a revisar.